El pasado domingo, durante el rezo del Ángelus dominical en la plaza de San Pedro en el Vaticano, el Papa Francisco expresó su preocupación por la situación actual en Nicaragua y pidió por la reconciliación y la paz en el país.
El Papa afirmó que sigue con gran atención los acontecimientos que se están desarrollando en Nicaragua, donde la violencia y la represión han dejado un saldo de cientos de personas muertas y heridas en medio de protestas antigubernamentales.
Francisco pidió a los católicos y a todas las personas de buena voluntad que se unan en oración por Nicaragua, para que se pueda encontrar una solución pacífica y justa a la crisis que está viviendo el país.
En sus palabras, el Papa Francisco destacó la importancia de la reconciliación y el diálogo como vías para superar los conflictos y construir una sociedad más justa y solidaria.
El Pontífice también instó a las autoridades y a todos los sectores involucrados en el conflicto a buscar el bien común y a trabajar juntos por el bienestar de todo el pueblo nicaragüense.
La crisis en Nicaragua estalló en abril de 2018 cuando una serie de protestas contra el gobierno de Daniel Ortega derivaron en una violenta represión por parte de las fuerzas de seguridad y grupos paramilitares afines al régimen.
Desde entonces, la situación en el país centroamericano ha sido objeto de preocupación por parte de la comunidad internacional y de organizaciones de derechos humanos que han denunciado la violencia y la falta de respeto a los derechos fundamentales de la población.
El llamado del Papa Francisco a la oración por Nicaragua es un gesto significativo que busca concitar la solidaridad y la compasión de todos los fieles hacia un pueblo que sufre y clama por justicia y paz. Oremos juntos por el pueblo nicaragüense, para que encuentren en la fe y la esperanza la fuerza necesaria para superar esta difícil situación y alcanzar la reconciliación y la paz que tanto anhelan.